MINISTERIO DEL PP PARA EL TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL
INSTITUTO VENEZOLANO DE LOS SEGUROS SOCIALES
Dirección de Información y Relaciones Públicas
Caracas - Venezuela
(PRENSA-IVSS) Unos 6.000 pacientes mensuales son atendidos a través de las consultas en la Clínica Popular Caricuao, centro asistencial perteneciente al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y al Ministerio del Poder Popular para la Salud y el Desarrollo Social.
Este centro asistencial tiene 27 años en funcionamiento y cuatro como Clínica Popular, lo cual se hizo con el objeto de ampliar el servicio asistencial que se ofrece a todos los venezolanos, tal como se establece en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Asimismo, cuenta con un Servicio de Emergencia, la cual funciona las 24 horas del día, donde los Servicios de Cirugía, Traumatología, Medicina Interna, Pediatría y Medicina Familiar hacen guardia todo el día, a fin de garantizar que un especialista en cada área esté dispuesto para la emergencia que se presente. Unos 9.000 pacientes mensuales son atendidos a través del área de emergencia, las cuales en su mayoría son pediátricas. Igualmente se realiza radiología convencional, Laparoscopia y cuentan además con un equipo de Cirugía Artroscópica, para realizar intervenciones y monitoreo de enfermedades por medio de una cirugía mínimamente invasiva, es decir, no es necesario abrir al paciente.
INSTITUTO VENEZOLANO DE LOS SEGUROS SOCIALES
Dirección de Información y Relaciones Públicas
Caracas - Venezuela
(PRENSA-IVSS) Unos 6.000 pacientes mensuales son atendidos a través de las consultas en la Clínica Popular Caricuao, centro asistencial perteneciente al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y al Ministerio del Poder Popular para la Salud y el Desarrollo Social.
Este centro asistencial tiene 27 años en funcionamiento y cuatro como Clínica Popular, lo cual se hizo con el objeto de ampliar el servicio asistencial que se ofrece a todos los venezolanos, tal como se establece en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Asimismo, cuenta con un Servicio de Emergencia, la cual funciona las 24 horas del día, donde los Servicios de Cirugía, Traumatología, Medicina Interna, Pediatría y Medicina Familiar hacen guardia todo el día, a fin de garantizar que un especialista en cada área esté dispuesto para la emergencia que se presente. Unos 9.000 pacientes mensuales son atendidos a través del área de emergencia, las cuales en su mayoría son pediátricas. Igualmente se realiza radiología convencional, Laparoscopia y cuentan además con un equipo de Cirugía Artroscópica, para realizar intervenciones y monitoreo de enfermedades por medio de una cirugía mínimamente invasiva, es decir, no es necesario abrir al paciente.
Nota de la Editora: A pesar de las bondades que expresa la Dirección de Información y Relaciones Públicas del IVSS la opinión de la comunidad difiere mucho de estas estadísticas. "Hay una molestia generalizada en los pacientes por la pugna que se presenta entre los trabajadores de este instituto y los de la Misión Barrio Adentro que impide un verdadero servicio. Algunas enfermeras y médicos son altaneros e indolentes con los pacientes y muchas veces no atienden a los usuarios y los envían al Centro de Diagnóstico Integral (CDI), ubicado en el sector UD6. Todo el tiempo los equipos están dañados. Los galenos llegan tarde a las consultas o no llegan". Hay muchas quejas sobre este centro de salud y sería bueno que las autoridades competentes se reunieran con los pacientes y cierto personal (marginado) para que conozcan la otra cara de la Clínica Popular de Caricuao. Como prueba fehaciente de lo dicho reproducimos un reportaje realizado por David Tarazona de El Parroquiano y que también fue publicado en la edición Nº 59 de La Columna de CaricuaoLa Clínica Popular de Caricuao: Edificio de la Quinta. Atención de la Cuarta
El Martes 16 de Abril y por la solicitud de muchos de nuestros lectores, decidimos visitar la Clínica Popular de Caricuao, con el fin de comprobar el por qué de varias quejas que nos habían llegado a nuestra redacción. Para comprobar dicha especie acompañamos a Luís Sevilla CI: 17.144.217, quien acababa de sufrir un accidente jugando pelota en su casa, ubicada en Antimano. Al llegar a Emergencias nos encontramos con una señorita, a quien no pudimos identificar, que nos indicó que pasáramos a un cubículo para que la doctora nos viera. Dependiendo de su evaluación nos darían ingreso, (al parecer el hecho de que el joven viniera en brazos no era garantía de que tuviera alguna emergencia). Al entrevistarnos con la doctora (que tampoco nos quiso dar su nombre), con apenas ver al joven y sin ponerle un dedo encima, diagnosticó que eso no era una emergencia, que debía ir por atención ambulatoria; al preguntarle sobre ¿cómo sabe eso sin tomarle ni siquiera el pulso? su respuesta fue que ella sabe lo que hace que si queremos que pasemos por el piso uno para que nos atiendan o nos vayamos a otro centro.
Piso 1. Ya en el citado piso nos dirigimos a la casilla correspondiente y, antes de poder inhalar aire en nuestros pulmones para expulsarlo en palabra hablada, nos indicó una señora, en estado de gravidez, que era la que atendía, que los números se reparten a la una de la tarde; eran las 9:30 de la mañana; al decirle que al joven le dolía bastante la pierna y como era evidente no podía caminar, nos indicó como en los mejores tiempos de la cuarta república: «mala suerte». Decidimos mandar al joven a otro centro y dirigirnos a la oficina de la directora de la institución, la doctora Yaribel Briceño, para saber la posición oficial acerca de todas estas irregularidades.Nos atendió el por-tero, Juan Martínez, quien nos notificó que la doctora estaba ocupada, que la esperáramos. Luego de dos horas de espera y la permanente «ocupación» de la doctora, decidimos retirarnos. Cual es nuestra sorpresa que a la salida del centro nos estaba esperando un ciudadano de nombre Humberto Morillo CI: 12.617.673, quien desempeña el cargo de coordinador de seguridad del referido centro. Aunque parezca mentira en estos tiempos de revolución, el ciudadano en cuestión nos esperaba para decirnos que no podíamos realizar ningún reportaje sin la autorización de la directora, seguido esto nos arrebató el Carnet y se fue a una oficina a tomar nota del mismo. Luego nos notificó que «está prohibida la entrada de los medios de comunicación, y menos de estos comunitarios», le indicamos que esperábamos por la directora que nos fijara su posición ante el trato tan decadente y cuarto republicano que se ofrece en esta institución; su respuesta fue: «no se pero acá no pueden hacer reportajes, les agradezco se salgan de las instalaciones de la clínica, incluso del estacionamiento». ReflexiónNos llama a reflexionar, estas actitudes de funcionarios supuestamente públicos que se formaron y ejercieron en la cuarta república y ahora les dan responsabilidades tan altas como la de estar al frente de una taquilla de una clínica revolucionaria y socialista popular. Sabemos que estos dos términos pueden sonar molestos o fastidiosos, pero deben poner atención a las palabras revolucionaria, porque nunca antes se había visto en este país semejante gasto público en materia de salud; antes se consideraba una locura gastar tanta plata en «obras sociales»; y socialista porque es para todos, no para los amigos o compañeros de partido. Esperamos un pronunciamiento por parte de los funcionarios del Ministerio de Salud, Alcaldía de Caracas y demás entes adscritos. Si les parecen falsas nuestras palabras acá plasmadas, les invitamos a darse una vuelta por esta institución de pueblo, pero entren por Emergencia como un paisano cualquiera, sin Carnet o identificaciones, soliciten atención y miren el trato. David Tarazona
El Martes 16 de Abril y por la solicitud de muchos de nuestros lectores, decidimos visitar la Clínica Popular de Caricuao, con el fin de comprobar el por qué de varias quejas que nos habían llegado a nuestra redacción. Para comprobar dicha especie acompañamos a Luís Sevilla CI: 17.144.217, quien acababa de sufrir un accidente jugando pelota en su casa, ubicada en Antimano. Al llegar a Emergencias nos encontramos con una señorita, a quien no pudimos identificar, que nos indicó que pasáramos a un cubículo para que la doctora nos viera. Dependiendo de su evaluación nos darían ingreso, (al parecer el hecho de que el joven viniera en brazos no era garantía de que tuviera alguna emergencia). Al entrevistarnos con la doctora (que tampoco nos quiso dar su nombre), con apenas ver al joven y sin ponerle un dedo encima, diagnosticó que eso no era una emergencia, que debía ir por atención ambulatoria; al preguntarle sobre ¿cómo sabe eso sin tomarle ni siquiera el pulso? su respuesta fue que ella sabe lo que hace que si queremos que pasemos por el piso uno para que nos atiendan o nos vayamos a otro centro.
Piso 1. Ya en el citado piso nos dirigimos a la casilla correspondiente y, antes de poder inhalar aire en nuestros pulmones para expulsarlo en palabra hablada, nos indicó una señora, en estado de gravidez, que era la que atendía, que los números se reparten a la una de la tarde; eran las 9:30 de la mañana; al decirle que al joven le dolía bastante la pierna y como era evidente no podía caminar, nos indicó como en los mejores tiempos de la cuarta república: «mala suerte». Decidimos mandar al joven a otro centro y dirigirnos a la oficina de la directora de la institución, la doctora Yaribel Briceño, para saber la posición oficial acerca de todas estas irregularidades.Nos atendió el por-tero, Juan Martínez, quien nos notificó que la doctora estaba ocupada, que la esperáramos. Luego de dos horas de espera y la permanente «ocupación» de la doctora, decidimos retirarnos. Cual es nuestra sorpresa que a la salida del centro nos estaba esperando un ciudadano de nombre Humberto Morillo CI: 12.617.673, quien desempeña el cargo de coordinador de seguridad del referido centro. Aunque parezca mentira en estos tiempos de revolución, el ciudadano en cuestión nos esperaba para decirnos que no podíamos realizar ningún reportaje sin la autorización de la directora, seguido esto nos arrebató el Carnet y se fue a una oficina a tomar nota del mismo. Luego nos notificó que «está prohibida la entrada de los medios de comunicación, y menos de estos comunitarios», le indicamos que esperábamos por la directora que nos fijara su posición ante el trato tan decadente y cuarto republicano que se ofrece en esta institución; su respuesta fue: «no se pero acá no pueden hacer reportajes, les agradezco se salgan de las instalaciones de la clínica, incluso del estacionamiento». ReflexiónNos llama a reflexionar, estas actitudes de funcionarios supuestamente públicos que se formaron y ejercieron en la cuarta república y ahora les dan responsabilidades tan altas como la de estar al frente de una taquilla de una clínica revolucionaria y socialista popular. Sabemos que estos dos términos pueden sonar molestos o fastidiosos, pero deben poner atención a las palabras revolucionaria, porque nunca antes se había visto en este país semejante gasto público en materia de salud; antes se consideraba una locura gastar tanta plata en «obras sociales»; y socialista porque es para todos, no para los amigos o compañeros de partido. Esperamos un pronunciamiento por parte de los funcionarios del Ministerio de Salud, Alcaldía de Caracas y demás entes adscritos. Si les parecen falsas nuestras palabras acá plasmadas, les invitamos a darse una vuelta por esta institución de pueblo, pero entren por Emergencia como un paisano cualquiera, sin Carnet o identificaciones, soliciten atención y miren el trato. David Tarazona
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